Los hoteles se extinguen en la Costa Blanca y el alquiler turístico es ya un referente en la oferta de alojamiento en la zona. Los propietarios en Costa Blanca han sabido profesionalizarse y adaptarse a la demanda de los usuarios, sobre todo gracias a la ayuda de las asociaciones y a las inmobiliarias y gestoras de propiedades, que han mejorado su servicio y han incorporado soluciones tecnológicas para facilitar las estancias.
El sector del alquiler vacacional en la Costa Blanca ya ha recuperado las cifras previas a la pandemia en cuanto a alojamientos disponibles, pero la buena noticia para los propietarios no se queda ahí: la ocupación se dispara superando a las cifras de 2019.
«La demanda del sector está creciendo porque se ha trabajado bien»
Miguel Ángel Sotillos es el presidente de la asociación de propietarios de viviendas turísticas Aptur, y analiza la recuperación del sector. «El número de viviendas turísticas se ha recuperado, ha subido un 20% porque muchas se perdieron en la pandemia. Teniendo ahora algunas plazas más, la ocupación podría haberse reducido pero este año la ocupación ha subido«, destaca el representante.
Con la mejora en el servicio, gracias a las asociaciones y a las gestoras de propiedades en Costa Blanca, han conseguido que el alquiler vacacional se consolide en el sector turístico. «La demanda en el sector está creciendo desde hace tiempo porque se ha trabajado muy bien tanto durante la pandemia como después, los usuarios lo han probado, les ha gustado y siguen recurriendo a ello después de la pandemia», añade el también presidente de la federación nacional, FEVITUR.
En Alicante el número de plazas en alquiler vacacional ya supera a los hoteles pero en zonas como la Costa Blanca «ya no hay hoteles, hay alojamientos turísticos de mucho nivel, con chalets y villas como en Moraira, que son la alternativa», subraya el representante.
Una rentabilidad de 16.000 euros anuales en alquiler vacacional de la Costa Blanca
Los últimos datos del INE sobre la Costa Blanca avalan esa recuperación. En los primeros meses de este año 2023 se ha disparado la ocupación, se han hecho un 30% más de reservas que durante el mismo período de 2019. En concreto, la ocupación en alquiler vacacional en Moraira, Jávea y Dénia es más del doble que en pre-pandemia.
Que el viajero demanda estos alojamientos en la Costa Blanca es más que evidente. Pero además, es una zona en la que los propietarios pueden sacar mucha rentabilidad de sus viviendas: en Costa Blanca 16.000 euros anuales.
Según Transparent, la empresa líder en medición de datos de alojamientos turísticos, sólo en Moraira las ganancias anuales de tener una propiedad en el sector podrían superar los 16.300 euros anuales. En Costa Blanca hay más de 12.300 propiedades, 7.200 de ellas están en Moraira.
Solhabitat: un ejemplo de los avances en la gestión del alquiler vacacional en la Costa Blanca
Solhabitat lleva más de 10 años ocupándose de la gestión de casas y Villas en Moraira, apartamentos en Jávea o chalets en Benissa, entre otras zonas de la Costa Blanca. En todo ese tiempo ha sabido adaptarse a los cambios incorporando un avanzado sistema para la gestión de alojamientos que está conectado a más de 30 portales de reservas online. Además, en Solhabitat realizan una labor de asesoramiento con los propietarios para que consigan aumentar la tasa de ocupación.
Desde Solhabitat aseguran que la transparencia es clave, y junto a ello la cooperación con otras empresas profesionales que puedan ampliar el servicio. «Trabajamos para que los propietarios tengan el máximo beneficio y estén tranquilos». Así es como gestoras como la de Solhabitat han conseguido impulsar el sector del alquiler vacacional y su recuperación.
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